En algunas ocasiones, las personas detectan el sabor metálico en la boca y desconocen las causas. Si desaparece en pocos días, posiblemente, no haya que alarmarse; no obstante, si perdura, lo más acertado es ponerse en manos de un buen odontólogo. Con un buen diagnóstico será mucho más fácil llegar al origen y garantizar el tratamiento correcto.
Cabe indicar, que esta sensación es muy habitual en la población adulta, aunque no se puede tratar como una enfermedad en sí misma, sus síntomas advierten de un trastorno en la salud. Por ejemplo, algunas personas pierden el gusto y el apetito y esto ocasiona un desorden alimenticio. También, se puede relacionar con el bruxismo, ya que un estado de estrés desarrolla diferentes patologías.
Causas del sabor metálico bucal
Cuando una persona cree que tiene bruxismo, lo más conveniente es que acuda al dentista más cercano para realizar una exploración. Lo habitual es empezar a utilizar una férula de descarga de bruxismo para mejorar los síntomas. Si bien es cierto, que no causa complicaciones graves, si la afección es intensa podrían aparecer lesiones en las articulaciones temporomandibulares. Se notará una especie de chasquido al abrir y cerrar la boca.
La férula de descarga es un dispositivo que impide que los dientes de arriba y abajo entren en contacto. De esta manera, se evitan las consecuencias negativas del bruxismo. No obstante, a veces podría aparecer el sabor metálico bucal que, en la mayoría de los casos, se debe a una mala higiene oral o enfermedades como la periodontitis. Cabe decir, que los desequilibrios en las funciones neuronales, también afectan al sistema nervioso y como consecuencia se produce el bruxismo.
Enfermedades y condiciones asociadas al sabor metálico
Hay una serie demalos hábitos y enfermedades dentales que se asocian con el sabor metálico. Sin embargo, las causas pueden ser diversas y lo mejor es consultar a un especialista para saber de qué se trata para descartar riesgos o evitar problemas mayores en un futuro.
- Una higiene bucodental deficiente es motivo de que aparezca este sabor que tiene que ver con la gingivitis, periodontitis y caries.
- El consumo de antibióticos, antidepresivos o tranquilizantes, también provoca el sabor metálico.
- Hay una serie de enfermedades como la diabetes, problemas en el riñón o el hígado que producen la sequedad bucal.
- Asimismo, no hay que descartar las infecciones (sinusitis o rinitis) o las alergias.
- La exposición química a ciertos metales (mercurio y plomo) o la alteración de los minerales (hierro o zinc) del propio cuerpo es objeto de estudio.
- La exposición a un tratamiento oncológico como la quimioterapia o la radioterapia es otro condicionante.
- Por último, están las alteraciones hormonales durante el embarazo y los primeros meses de gestación.
Cuidado bucal y hábitos que pueden reducir el sabor metálico
Para tener una buena higiene bucal, la persona tendrá que empezar por preocuparse por combatir la placa bacteriana. Además de cepillarse diariamente los dientes y hacer un buen enjuague bucal, se recomienda reducir el consumo de alimentos picantes y bebidas cítricas. También, es conveniente hidratarse correctamente para mejorar la salud bucodental.
Consulta con un profesional: cuándo buscar ayuda para el sabor metálico
La recomendación es acudir a la consulta de odontología general para que un profesional haga una valoración y pueda detectar la causa. En un alto porcentaje de las ocasiones, este sabor remite si se trata de un resfriado o la persona está en tratamiento médico. No obstante, si el sabor es frecuente y empieza a ser molesto, lo mejor es descartar riesgos.
En conclusión, si todavía tienes dudas sobre a qué se debe el sabor metálico en la boca, no dudes en consultar a un especialista dental. Tal como observamos, hay muchas razones por las que se puede producir y el bruxismo puede ser una de ellas. Lo mejor es descartar y tener un diagnóstico acertado para garantizar un buen tratamiento.
